Vuelven a ser moda.

24.02.2010 13:36

Vuelven a ser moda

El triunfo de los Patronelli en el Dakar los puso en primer plano. Y en Punta del Este son un fetiche de famosos. Costos, imprudencias y los conductores top.

 

Bastó que Marcos y Alejandro Patronelli ganaran el Dakar, para que los cuatriciclos volviesen a estar de moda. Relegados a los más jóvenes y a unos contados fanáticos, hasta hace poco eran mal vistos en las playas más chic. Pero esta temporada revivieron y coparon los paradores top de Punta del Este, conducidos por celebrities como Marcelo Tinelli, Nicolás Repetto y Marcela Tinayre.

Efecto Patronelli. El tándem fue atractivo desde el vamos. Con 30 años, el ganador de la categoría “Cuatriciclos” del Dakar, Marcos Patronelli, mantuvo durante 15 días y 7.000 kilómetros una fama que derritió a todas las fierreras. Su hermano Alejandro, en cambio, festejó cada etapa como un partido de fútbol y se consagró segundo sin perder jamás la sonrisa. Una historia de esfuerzo y dedicación al “off road” que cultivan desde su adolescencia en Las Flores. Juventud, éxito y belleza fue el combo perfecto para que los cuatriciclos volviesen a estar en primer plano.

Sin embargo, las motos 4x4 son un lujo para pocos. Un cuatriciclo Honda, por ejemplo, cuesta entre US$ 12.000 y US$ 18.000, aproximadamente. lo mismo que un auto 0 kilómetro. Además, mientras un automóvil se usa durante todo el año, el cuatriciclo se limita a la temporada de verano. Sin embargo, el último capricho de los fierreros es todavía más prohibitivo. Equipado con un techito y una especie de baúl, esta cruza entre cuatriciclo y camión pasó de los campos bonaerenses a las playas esteñas, sin escalas, convirtiéndose en el “chiche veraniego” de los más pudientes. ¿El valor? Para obtener el modelo Rhino Sport que comercializa Yamaha, hay que desembolsar nada menos que US$ 22.000. La marca Kawasaki lo llama Mule y lo vende a US$ 20.000. Aunque los precios parezcan irrisorios y su uso efímero, las celebrities no tardaron en adoptar y popularizar este nuevo transporte.

Lujo 4x4. En su primer verano como soltero, Marcelo Tinelli se mostró arriba de un cuatriciclo Kawasaki rojo de gigantes proporciones que forma parte de la flota que guarda en su chacra Guanahani, para el resto de la familia. La mole, que pesa 273 kilos, le costó aproximadamente

US$ 13.300, lo mismo que un auto pequeño. Tinelli lo utiliza para saltar los médanos de su paraíso privado, para manejar hasta el restaurante “La Huella” de José Ignacio y para pasear a su hija Juanita y a Francesca, la niña de Andrea Bursten y Federico Rivero. Su amigo Nicolás Repetto también es un fierrero de larga data. El conductor suele conducir por la Ruta 10 sobre una imponente moto BMW, enfundado en una campera de cuero, junto a su fiel copiloto Florencia Raggi. Sin embargo, para los programas familiares diurnos prefiere la sunga y el cuatriciclo, que le sirve para visitar a los Gravier y a los Rivero, sus vecinos de La Boyita.

A pocos metros de Repetto, algunos afortunados podrán cruzarse con una troupe de mujeres angelicales montadas en motos 4x4. No es un espejismo ni la filmación de una publicidad, sino la chacra La Fontana, donde recala Pancho Dotto junto a sus modelos, verano a verano. Allí juegan al fútbol playero, corren con su personal trainer y montan los cuatriciclos Honda con Pancho, su padre por la temporada. Otra que no abandona la moto 4x4 durante todas las vacaciones es Marcela Tinayre, que pasea a su hijo Rocco y a su nieta Ámbar por la calles de arena de José Ignacio. También en el balneario uruguayo, el banquero Jorge Brito prefiere hacerlo en soledad, mientras que en Pilar, Daniel Hadad lo utiliza para salvar las distancias entre su casa del country Mayling y un

shopping de la localidad. Aunque la ley 24.449 establezca que todas las motos deben ser usadas con casco, ninguna de las celebrities lo utiliza, ¿si no qué sentido tiene el alto perfil?

Peligros. Fue precisamente el hijo de un famoso como la Brujita Verón quien protagonizó un accidente con una moto todo terreno. Con apenas 9 años, su hijo Deian atropelló con su cuatriciclo a una joven que tomaba sol en un balneario de Cariló. También este verano, un niño de 7 años que iba al mando del mismo vehículo en Mendoza, junto a su hermana de 11, murió al chocar con un camión.

Paradójicamente, Mendoza posee una ley local que restringe su uso a circuitos establecidos y las autoridades exigen que sus conductores rindan un examen para probar su grado conciencia sobre el peligro que corre la flora y la fauna. En la Costa Atlántica, la historia es otra. “No está contemplado por la ley como vehículo, por eso cae dentro de un vacío legal”, explica Gustavo Brambati, subgerente de seguridad vial del Centro de Experimentación y Seguridad Vial. Por esa misma razón, los cuatriciclos no están habilitados para circular por la vía pública, menos aún en playas. Aunque para el especialista se deberían conducir a partir de los 17 con autorización de los padres, las autoridades no exigen una licencia especial.

La ley de tránsito 24.449 establece que se debe llevar casco al conducir cualquier tipo de moto, sin embargo, basta un paseo por Pinamar para notar que tan sólo el 37 por ciento de los conductores lo utilizan, como determinó CESVI. Para Brambati, los cuatriciclos están preparados para llevar apenas dos personas, ya que su peso puede aplastar fácilmente a cualquier menor de edad. “Las parrillas que antes se usaban para transportar productos agrícolas, hoy son ocupadas por niños”, comenta.

El triunfo en el Dakar y su paso por el Este los colocó en el pedestal de los objetos más deseados. Sin embargo, los cuatriciclos son un lujo peligroso sólo apto para billeteras abultadas y gente temeraria.

 

 

Marcelo Tinelli y sus hijos en su "mole"Kawazaki.

 

 

Pancho Dotto y sus modelos en un Honda.